sábado, 17 de marzo de 2012

Adele


Adele, la rubia gorda de voz prodigiosa. El torrente sobre el escenario que aparenta muchos más años de los que tiene. ¿Por que tenía que llamarse esa vaca que ahora está tan de moda precisamente como yo? Yo siempre he estado encantada de ser Adele, un nombre poco común, pero ahora esa morsa me ha robado el privilegio, y vaya donde vaya y me presente, siempre el odioso comentario "Adele, ¿Como Adele?" El otro día me lo dijo un oficinista y contesté: "No, como Francisco Torres" (ese nombre ponía en su tarjeta identificativa en su chaqueta). El hombre me miró sorprendido, pero la mirada que le devolví le puso  a trabajar con la boca bien cerrada. NO tengo NADA que ver con esa diva estúpida. Soy morena, esbelta y puedo hacer cosas con mi cuerpo que ella ni en sueños podría. Soy bailarina (semiprofesional), bailo bailes de salón en competiciones, y ahora, cuando abra al puerta de la sala donde practico estará mi pareja de baile esperándome, paciente sabiendo que  entraré con mi pelo estirado hacia atrás, caminando erguida y daré un recital de perfección cuando baile con él.
Un saludo corto, el entrenador pone el CD, suena un tango impetuoso, me alegro de no tener que poner sonrisa falsa como para otras disciplinas y me muevo totalmente concentrada por el parquet. Mi pareja sonrie radiante al terminar, jadeante. Yo me ato del cordón del vestido a la cintura, sin expresión. Me marcho antes de que mi compañero se ponga a agradecerme de nuevo patéticamente que baile con él. No puedo hacerle notar que él es realmente bueno. Yo no bailo con mediocres. Me cambio a toda prisa, saliendo antes de que vengan las marujas de la hora siguiente y me voy a mi exclusivo barrio. Dios, cada vez se me hace más difícil salir de él, me siento sucia e inmunda sólo de ir en coche por "otras" zonas.

2 comentarios:

  1. Quizá una cura de humildad le vendría bien a ese carácter agrio y estúpido. ¿no crees?

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  2. No puedes describir mejor a Adele con las palabras "agrio" y "estúpido". Pobrecilla. Dejémosla hablar un poco más, ¿no?

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